domingo, 25 de junio de 2017

FOTOGRAFÍA Y LITERATURA

      Manuel Salinas, Ignacio García y Humberto Hernández, el pasado jueves 23, disertaron, en el Auditorio del IVEC, sobre Fotografía y Literatura.
   Salinas comenzó por "poner en contexto" la relación a veces no visible, entre la imagen y la palabra y la larga historia de la Fotografía ligada a la Literatura, que sigue viva incluso a pesar de los estúpidos "memes" de las redes sociales y a pesar de la violencia de los pies de grabado en los medios o el relato hablado de los presentadores, que no explican la imagen, pero que pueden estropearla y casi siemp4re lo consiguen.
   Me sedujo Ignacio García, pero como siempre me ocurre, me provocó la compulsión de llegar a casa y buscar los viejos libros, entelarañados y polvosos, los cuales, por más que me la paso con un sacudidor y una brocha en mano, se las arreglan para hacerse más viejos, igual que yo.
   Roland Barthes, (1915 - 1980) y su "La Cámara Lúcida", (Le chambre claire), es quien, según entendí o según lo siento, es quien más nos acerca a la comprensión de la Fotografía y la Literatura, cuando menciona que existen, cuando menos, dos "momentos" en el espectador, (el que mira la fotografía, el "veedor", como se me ocurre decirle), el Punctum, que es la fascinación por la imagen y el Studium, que es la atracción por la imagen.
    Uno ve la foto. En algunos casos, se queda fascinado por la imagen y se queda, además, pensando en la serie de significados que tiene para quien la mira, pero también en los "otros significados", es decir, lo que puede significar para los otros. Punctum. 
    Uno ve la foto. Y sin que medie explicación racional, se siente uno "atraído" por la imagen, a sabiendas, además, que aunque sea la foto de uno mismo, ya nunca podrá recuperarse ese momento: es un tiempo que se quedó detenido allí en el papel, para siempre jamás y que no tendremos en ningún momento de la vida. Studium.
   La dificultad no fue encontrar el libro, sino reelerlo con otros ojos, con muchos más años de experiencia y encontrar, después de escuchar a Ignacio García, elementos que se habían quedado escondiditos en alguna de las páginas de Barthes, lo cual me tendrá desvelada unos cuantos días.
   Además de Roland Barthes, Ignacio hizo referencia, entre otros, a dos personajes: Pierre Verger, (1902 - 1996), el fotógrafo, etnólogo e investigador seducido por México, cuya obra se expone en el propio IVEC y está para disfrutarla y al poeta Mark Strand, (1934 - 2014), de quien confieso que sólo he leído, al algún momento, las traducciones de Octavio Paz, lo cual, naturalmente, es una maravilla.
   Seducido básicamente por Giorgio de Chirico, Magritte y Max Ernst, Mark Strand nos acerca, en un "camino al revés", de la Literatura a la imagen, no sólo los cuadros de estos tres pintores, sino a otros más, lo que hace de su obra algo muy especial.
   Humberto Hernández, a quien no conocía, nos presentó una serie de imágenes, en blanco y negro, como deben ser las buenas fotos y dio lectura a cortos textos de John Steinbeck, Mario Vargas Llosa y un parrafito de Marcel Proust y el primer besito que le dio a Albertina, quien el buen lector sospecha que más bien era Alberto.
   Si a usted las cosas de la vida no le permitieron asistir a la conferencia ni modo. Se la ha perdido.
   Pero esto me lleva, otra vez plantear imágenes con palabras, a pensar en el tipo de público que se acerca a las conferencias y a otro tipo de actividades culturales. Los tipos podrían llenar varias páginas, pero es domingo de descanso, dicen, así que sólo quiero referirme a: a) El público que va porque no tiene algo "mejor" que hacer; b) el que sabe que habrá copetín de vino y algunos bocaditos y ya la hizo, cena gratis; c) el que asiste debidamente vestido, peinado y maquillado, porque sabe que habrá fotógrafos y quien quita chulis, a lo mejor me sacan fotos y d) el que asiste "para aprender".
   De estos, con toda falta de respeto, le diga que somos pocos.
   Y sí: éramos pocos pero creo que nuestro aplauso y respetuoso silencio, hizo sentir a Manuel Salinas, Ignacio García y Humberto Hernández, que nos habían abierto "otro panorama", "otra imagen" y nos habían remitido a la búsqueda de la Fotografía y la Imagen.
    Y nada más.
 
 
 
 
 

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